LOS "BAJITOS" TAMBIEN JUEGAN

El pasado fin de semana, estaba presenciando un partido de infantiles, y en la grada escuché la conversación que mantenían dos chavales que no tendrían mas de 14 o 15 años, con quien supongo sería su padre, y me quedé con la siguiente frase:

"No lo hacen mal, pero son un equipo muy bajito, no harán nada destacable"

Esta frase o parecida, yo, ya la había escuchado antes, concretamente dirigida al equipo infantil masculino de CBC 2001, que a la postre, fue campeón regional en la temporada 2014/15.

Eso me hizo pensar y recordar, que aunque en el baloncesto, la estatura es importante, siempre ha habido excepciones, y que con trabajo y sacrificio, muchos "bajitos" han logrado dejar su marca en este deporte.

No sé si los dos chavales de la grada, leerán esta entrada, pero ellos han sido su inspiración con una sola frase.

LOS "BAJITOS" TAMBIEN JUEGAN

En el mundo del baloncesto, a menudo se asocia la habilidad y el éxito con la altura. Los jugadores de gran estatura son vistos como los más dominantes en la cancha y a menudo reciben más atención mediática que sus contrarios más pequeñas. Sin embargo, hay una pequeña pero impresionante lista de jugadores de baloncesto de poca estatura que han desafiado las expectativas y han dejado una huella imborrable en el deporte.

En esta entrada, exploraremos la historia de los jugadores de baloncesto de poca estatura y su impacto en el juego, a modo de reconocimiento y homenaje.

Uno de los jugadores de baloncesto de poca estatura más icónicos es Muggsy Bogues. Bogues, quien con su 1,60 metros de altura, fue seleccionado en el número 12 del draft de la NBA en 1987 y jugó durante 14 temporadas en la liga. A pesar de su baja estatura, Bogues era un jugador increíblemente rápido y ágil, lo que lo convirtió en un defensor formidable. Además, su habilidad para pasar y robar balones lo convirtió en un jugador muy valioso en la cancha.

Otro jugador de baloncesto de poca estatura que ha dejado una huella indeleble en el deporte es Spud Webb. Con una altura de solo 1,68 metros, Webb se convirtió en el campeón del concurso de mates de la NBA en 1986, sorprendiendo a todos con su capacidad de salto , lo que le permitia atacar la canasta y realizar mates. Webb jugó durante 12 temporadas en la NBA y fue nombrado Mejor Sexto Hombre de la Liga en 1994.

Además de Bogues y Webb, ha habido otros jugadores de baloncesto de los denominados "bajitos" que han dejado su marca en el deporte. Earl Boykins, quien con solo 1,65 metros de altura, jugó durante 13 temporadas en la NBA y era reconocido por su habilidad para anotar canastas a pesar de su tamaño. Nate Robinson, con una altura de solo 1,75 metros, ganó tres concursos de mates de la NBA y jugó durante 11 temporadas en la liga. Y Tyrone "Muggsy" Green, quien desde su 1,70 metros de altura, jugó durante 10 temporadas en la NBA y es conocido por su habilidad para pasar el balón.

Aunque estos jugadores de baloncesto de poca estatura a menudo se enfrentaban a desventajas en la cancha debido a su tamaño, muchos de ellos encontraron formas creativas de superar estas limitaciones. Por ejemplo, Bogues y Robinson explotaban su velocidad y agilidad para eludir a los defensores más grandes y llegar a la canasta. Boykins, por otro lado, desarrolló una habilidad única para anotar desde larga distancia, lo que lo convirtió en un jugador valioso en la cancha.

Pero si algo ha caracterizado a estos jugadores de baloncesto de poca estatura, ha sido su ética de trabajo y su determinación. A menudo se les decía que eran demasiado bajos para jugar al baloncesto, y en lugar de dejar que eso los desanimase, utilizaron esa crítica, como elemento de motivación, para trabajar aún más duro y demostrar a todos que podían competir con los mejores.

Hoy en día, existen un gran número de jugadores en la NBA y en otras competiciones, de los considerados "bajitos", que han brillado y brillan en sus campeonatos, valgan como ejemplo los F. Campazzo, J. Mclaughlin, Chriz Chiozza, J. Alvarado, o el propio Chris Paul, que tuvieron como ejemplo a los anteriormente mencionados, aunque es destacable, que la preparación física de éstos jugadores, actualmente está muy por encima de la que tenían en los 80 y 90 del siglo pasado.