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lunes, 22 de junio de 2020

CUANDO LAS COSAS SE HACEN BIEN

Si hace ya algunas semanas, nos congratulábamos de la permanencia una temporada mas de UCAM-CB MURCIA en la máxima categoría del baloncesto nacional, y el ascenso a Leb Oro de REAL MURCIA BALONCESTO-MYRTIA, hoy nos alegramos, tras la publicación de ascenso a Leb Plata de los amigos del Club Jairis de Alcantarilla, quienes iniciaron un proyecto que con mucho sacrificio y trabajo y sin hacer nada de ruido, ha dado sus frutos, siendo un ejemplo de lo que se puede llagar a conseguir desde un Club de baloncesto de formación, que trabaja y de que manera, con una cantera, a la que cuida y mima con esmero. Ya fue un éxito el colocar a su equipo femenino UCAM-PRIMAFRIO en liga femenina 2 y ahora corona con el ascenso de su equipo masculino de la liga EBA, todo ello en una localidad, que supera por poquito, los 42000 habitantes censados. Algo se estará haciendo muy bien, mi mas sincera enhorabuena.
No quisiera olvidarme de otro club, que está trabajando muy bien desde hace ya bastante tiempo, como es Molina Basket, quienes posiblemente, y no es una información oficial, se planteen la posibilidad de salir la próxima temporada en EBA, de lo que me alegraría, pues se trata de un club al que tengo especial cariño y conservo amistad con algunos miembros del mismo. Ojala y lo consigan.

Insisto en que en Murcia se están haciendo las cosas muy bien, al menos aparentemente, lo que me hace mirar desde el otro lado del Puerto de la Cadena con cierta sensación de envidia, ya que se cumplen 30 años desde que el CB PROEXINCA CARTAGENA, compitiera en la segunda división del baloncesto nacional, la Primera B, actual Leb Oro, desde aquel hito, y tras un proyecto que no cuajaría, varios clubes, intentaron ocupar su lugar, como el CB Mare Nostrum, o el CAB Cartagena o su heredero Club Basket Cartagena, sin pasar de la actual EBA.
Era el equipo que mas publico congregaba de la categoría en su pabellón, el central de Wsell de Guimbarda, eran habituales los llenos atraídos por jugadores como Miguel Tarin , Derrick Hamilton, Paco Guillem, o los de la casa, como Marcos Molina , Primi Abad o Paco Carmona.

Son ya 30 años huérfanos de baloncesto de nivel, en una ciudad como la portuaria, que al corto entender del que suscribe, merecería codearse deportivamente en categoría superior a la actual.

Reitero desde estas lineas, mi enhorabuena por los logros obtenidos a los clubes de la región, y deseo que desde Cartagena hagamos un examen de la situación y se trabaje en pos de conseguir que esa brecha de 30 años, no siga incrementándose.    

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